Después que el mayor general Cliver Alcalá Cordones fue trasladado por la DEA a los Estados Unidos el 27 de marzo, el capitán de la Guardia Nacional Antonio José Sequea Torres, quien desde mediados de enero estaba al frente de uno de los campamentos, tomó el control total. Cambió el nombre Fuerza de Tarea por Operación Gedeón. Expulsó a los hombres de mayor confianza de Alcalá. Y lanzó una aventura que llevó a la detención de más de medio centenar de hombres y a la muerte a un grupo indeterminado.
Capitán Antonio José Sequea Torres, integrante de la III Promoción Batalla de Ayacucho, estaba de comisión en el Sebin. Siempre se destacó por su habilidad para infiltrarse y lograr objetivos, aunque no fuera por caminos nada probos”, según revela un general que lo tuvo de subalterno. Es así como Antonio José logra estar cerca de hombres relacionados a la Inteligencia como el Mayor General (Ej) Hugo Armando Carvajal Barrios, el general de división (Ej) Manuel Ricardo Cristopher Figueras, General en Jefe (Ej) Gustavo González López.
La vinculación del capitán Sequea Torres con Diosdado Cabello, la hace a través del Sebin. Uno de los hombres de Sequea, además del capitán Pimienta, es el primer teniente (Ej) Jairo Rafael Bethermytt Carrillo, a quien el General de División Eduardo Serrano Díaz había logrado infiltrar en Colombia.
Después del 30 de abril 2019, luego que le allanan la finca, VistaAraguaRanch en el sector La Esperanza de Tejerías, a una hora de Caracas, le roban los valiosos caballos de carrera. Sequea señala de eso al ex ministro del Deporte Antonio Enrique Álvarez Cisneros alias El Potro Álvarez, presidente del Hipódromo. Emite amenazas por sus redes sociales, pero ya su poder había entrado en crisis.
Meses después hace contacto con el presidente de la Asamblea Constituyente, a quien uno de los hermanos mayores de Sequea le había supervisado una propiedad en Monagas. El capitán se mantiene en contacto con Diosdado Cabello hasta el desenlace de la Operación Gedeón.
Toda la carrera militar del capitán Sequea se caracterizó por irregularidades. Él ingresó, en septiembre del año 1999, a la Escuela Básica de la Fuerza Armada en Maracay, como miembro de la Promoción “Batalla Toma de las Flecheras” de la antigua Escuela de Formación de Oficiales (Efofac). Al año siguiente, luego de pasar a II año y estar en la sede de Fuerte Tiuna, fue dado de baja, por deficiente rendimiento académico.
Estuvo cuatro años en la vida civil. Un amigo de Sequea narra a Infobae que “una noche, en la vida nocturna de Caracas, se tropezó con el subteniente (Ej) Orlando Alejandro Torrealba Díaz (Promoción año 2000 Gral. en Jefe Juan José Flores), edecán del entonces presidente Hugo Chávez, quien lo introdujo a un selecto círculo de jóvenes poderosos, donde figuraba el entonces subteniente Antonio José Morales Rodríguez, quien fue el Alférez Mayor de esa promoción año 2000, edecán privado de Chávez, hoy es teniente coronel y, desde junio 2017, Superintendente de las instituciones del sector bancario (Sudeban). También pertenecía a ese grupo Rosa Virginia Chávez, la primogénita del entonces presidente de la República, entre otros”.
Es así como en el año 2005, producto de estas influencias y amistades, logra reingresar directamente como cadete de II año a la EFOFAC. “Es una gran irregularidad, porque a Antonio José Sequea Torres se le permite pasar por encima de la doctrina académica de formación militar al no cursar el I año en la Escuela Básica”. Entra a la vida militar usando influencias externas, lo que marcó el desarrollo de su vida profesional.
Una vez graduado en el año 2008, en la Promoción Batalla de Ayacucho, y por recomendación del teniente Morales Rodríguez, es enviado a trabajar en la sede central de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM, hoy Dgcim) en Boleíta, con el director de la institución, el General Hugo Armando Carvajal Barrios “El Pollo”, quien lo designa como uno de sus tantos ayudantes.
Un oficial que lo conoció en sus labores en la DIM, lo recuerda como “malandro e irrespetuoso, sin idea alguna del cumplimiento de la disciplina ni la subordinación”. Con el tiempo fue desempeñando labores más dependientes del general Carvajal. “Llegó a ser uno de los que se encargaban del trabajo sucio, logrando capitalizar gran cantidad de dinero y bienes a través de la extorsión y el botín de guerra, tales como una finca en Tejeria del estado Aragua dedicada a la cría de Caballos de Coleo”.
Es así como el capitán Sequea Torres logra bienes inexplicables para un militar de su rango, que ni siquiera un oficial superior puede justificar. “No solo apartamentos en Los Naranjos y La Tahona en Caracas, una casa bote con yate en Lechería (estado Anzoátegui), varios vehículos de lujo en Caracas. Adquirió caballos costosos de 100 mil dólares, por ejemplo”.
Con la muerte de Chávez y la salida del general Carvajal Barrios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), Sequea Torres perdió influencia. No contó con la protección del director entrante, general (Ej) Iván Hernández Dala, quien adopta como pupilo al entonces capitán (GNB) Alexánder Enrique Granko Arteaga, hoy con el rango de Mayor y jefe de la Dirección de Asuntos Especiales (DAES) de la Dgcim.
Sequea Torres participó en casos relevantes, como la detención del general (Ej) Ángel Omar Vivas Perdomo, quien es el oficial que estando activo se opuso a la implementación del lema “Patria Socialismo o Muerte” en la Fuerza Armada. Fue detenido el 7 de abril 2017, luego de tres años con orden de aprehensión; un vehículo causó un choque contra el portón de su casa, justo en el momento en que su esposa iba llegando. El alto oficial salió a ayudarla y una comisión de funcionarios de la DGCIM lo capturó; el capitán Sequea lo introduce con gran violencia a una camioneta causándole una lesión en la columna, que nunca le permitieron fuera atendida. El 1 de junio 2018 fue excarcelado presentando un avanzado deterioro de la salud.
En el caso de Domingo Goncalves, llamado el Zar de los Casinos en Venezuela, el capitán Sequea participó, en el 2013, en el allanamiento de su vivienda, una lujosa mansión en la Urbanización Cerro Verde de Caracas, que le fue confiscada por legitimación de capitales y que Sequea la tuvo a su cargo, aun después que el Zar salió en libertad.
En los cuerpos de Inteligencia se hablaba abiertamente de la participación del capitán Sequea en el secuestro del teniente coronel de la Aviación, Juan Carlos Díaz Pérez, en enero del 2017 en Sanare estado Lara, quien fue dejado en libertad días después en el estado Carabobo.
Fue el autor intelectual de la fuga del alcalde de Guanta Jhonnathan Teodoro Marín Sanguino, quien se declaraba alcalde comunal socialista e hijo de Chávez. “En el 2018, Marín estaba solicitado por desfalco de la Faja Petrolífera del Orinoco. Sequea planifica sacarlo hacia Colombia, en combinación con el capitán (GNB) Víctor Alejandro Pimienta Salazar, a quien le ordena llevarlo hasta la frontera y salir por el Zulia hacia La Guajira”.
Cuando Marín Sanguino pretende abordar un avión, ya del lado colombiano, no se lo permiten porque el pasaporte no tenía el sello de salida en Paraguachón. El capitán Pimienta lleva el documento hasta Paraguachón, pero el Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) lo detiene y lo entrega a la Dgcim, donde permanece seis meses detenido y regresa a su componente militar. Marín logró viajar a México a llevar una vida de lujo.
Sequea Torres, por su parte, es expulsado de la DGCIM por el MG Hernández Dala, y puesto a la orden de la Comandancia de la Guardia Nacional, de donde lo rescata el general (Ej) Gustavo Enrique González López, quien lo instala en labores de inteligencia en el SEBIN.
Cuando el general (Ej) Manuel Ricardo Cristopher Figuera llega a dirigir el SEBIN, el astuto capitán Sequea Torres le hace creer que González López lo tenía en misiones especiales. Hace estrecha relación con el alto oficial, pero también con el líder de Voluntad Popular, Leopoldo Eduardo López Mendoza; así se incorpora a la Operación Libertad del 30 de Abril 2019, donde operó como enlace en diferentes niveles.
Un compañero suyo confiesa que “posterior al 30A, al ver que no se logró derrocar a Maduro, cae en desespero por recobrar su vida de influencia, lujo e impunidad y empieza a operar al mejor postor”.
Ese 30 de abril “los Sequea nunca van a embajada alguna. Ellos decían que estaban en las embajadas, y a los militares en las embajadas les decían que estaban en un barrio de Petare. Solo fueron mentiras. Ese 30 de abril, el capitán se comunicó con José Alberto Socorro Hernández, alias “Pepero”, a quien había conocido hacía tiempo en un gimnasio de Los Naranjos; él refugió a los Sequea en su casa durante dos meses”.
De Pepero han dicho Jorge Rodríguez y Diosdado Cabello, que es funcionario de la DEA (Administración para el Control de Drogas) y que es un narcotraficante con una finca en Guajira colombiana. Lo que no han dicho es que la casa de Pepero, donde estuvieron los Sequea, desde el 30 de Abril, está en Caracas.
Sequea permanece aproximadamente 3 meses en la casa de alias Pepero en Caracas con sus hermanos posteriormente escapa hacia Colombia. “Durante este tiempo a través del Sargento Perdomo (El Duende), se apodera del Armamento del D-432 usado el 30A y que estaba oculto en diferentes lugares de Caracas y el interior del país, entre ellas las dos Ametralladoras AFAG 7.62mm que fueron puestas con afustes en dos camionetas en Macuto, el 3 de mayo 2020, como evidencia de la supuesta invasión. Con ello tenía material de guerra suficiente para hacer creer que contaba con apoyo y armas”.
Es a través del sargento Perdomo y otro militar que, en julio 2019, involucran a dos escoltas de Juan Guaidó, de nombre Erick Miguel Sánchez Azuaje y Jason José Parisi Castrillo, en la venta de cinco fusiles del 30A, por intermedio del Comisario Chávez del Sebin.
En el último trimestre del año pasado el capitán Sequea pretendió irse a España, donde vive su esposa y sus hijos; pero las autoridades del aeropuerto El Dorado de Bogotá lo detuvieron al detectar que el pasaporte con el que pretende viajar era falso. Un amigo personal de la academia confiesa que “estuvo dos días detenido. Llamó a varias personas para que lo ayudaran, entre ellos a unos generales y políticos en el exilio, quienes intercedieron por él, argumentando que había sido un error, que lo habían engañado y así logró salir en libertad, pero no le permitieron viajar”.
Se incorpora activamente con el grupo de Cliver Alcalá, quien le cede la operación de uno de los campamentos en Riohacha. El capitán se trae consigo a hombres de su confianza, involucra a alias Pepero y a Elkin Javier López Torres alias Doble Rueda, desplaza el campamento. Hace contactos con militares y dirigentes políticos de Oposición como el comisario Iván Simonovis. Cuando Alcalá Cordones es llevado por la DEA a los Estados Unidos, Sequea monopoliza no solo los campamentos sino las comunicaciones con Jordan Goudreau, el de la empresa Silvercorp y con el capitán Javier Nieto Quintero.
Se sentía a sus anchas para montar la Operación Gedeón, involucrando a varios militares, Rayl Baduel, Hector Hernández Da Costa e Igber Marín Chaparro, que no tenían conocimiento de Gedeón, incluye a Guaidó y se incluye en el organigrama de poder como licenciado y ministro del Interior. Sequea siempre presumió del apoyo, incluso económico, de empresarios, generales y políticos. /Con información de Infobae