La ciudad de Shulan, en el noreste de China, ha sido puesta en cuarentena este lunes, después que en los últimos días se detectara un aumento de los casos de coronavirus y las autoridades temieran una segunda ola de contagios.
Todos los distritos y los complejos residenciales de la ciudad de 700.000 habitantes, en la provincia de Jilin, cerca de la frontera con Rusia, fueron clausurados al mediodía del lunes, dijo el grupo local de prevención y control de coronavirus en un comunicado.
Las medidas son similares a las que las autoridades dictaron en diciembre Wuhan, la ciudad de la provincia de Hebei donde comenzó el brote: todos los barrios y complejos residenciales fueron cerrados, y solo una persona de cada hogar puede salir durante dos horas cada dos días para comprar bienes de primera necesidad.
China ha controlado en gran medida el virus después de meses de bloqueos y restricciones en los viajes, pero los temores de una segunda ola han aumentado a medida que han surgido grupos en las provincias del noreste y en la propia Wuhan.
El primer caso en Shulan fue informado hace dos semanas. Desde entonces, al menos 34 personas han sido infectadas en la provincia de Jilin y tres en la vecina Liaoning.
Shenyang, una ciudad de alrededor de 7,5 millones en Liaoning, puso en cuarentena a más de 7.500 personas después de descubrir tres nuevos casos de coronavirus en los últimos cinco días.
La ciudad informó su primer caso local nuevo en 89 días el lunes y otros dos nuevos casos locales el jueves. Su gobierno confirmó el jueves que los nuevos casos estaban vinculados a un grupo en Shulan, a casi 500 kilómetros de distancia.
La ciudad también ha pospuesto la reapertura de las escuelas, algunas de las cuales habían sido programadas para dar la bienvenida a los estudiantes el viernes.
Las autoridades en la zona cero pandémica de Wuhan también ordenaron pruebas masivas de COVID-19 para los 11 millones de residentes después de que surgiera un nuevo grupo de casos durante el fin de semana.
El presidente Xi Jinping dijo el jueves pasado que se deben intensificar las medidas de contención en Jilin, las vecinas Heilongjiang y Wuhan “para evitar el resurgimiento de infecciones”, informó Xinhua.
Las ciudades de Jilin y Shulan, ambas en la provincia de Jilin, fueron fueron reclasificadas como de alto riesgo después de que surgiera un grupo de casos relacionados con una mujer sin antecedentes conocidos de viajes o exposición al virus. En respuesta, las autoridades ordenaron el cierre temporal de lugares públicos, escuelas y transporte público.
El vicealcalde de Jilin advirtió el miércoles que la situación era “extremadamente severa y complicada” y que “existe un gran riesgo de una mayor propagación”. /Con información de Infobae