Son horas decisivas para el gabinete. Medios brasileños afirman que los uniformados se sintieron traicionados por el comportamiento del presidente Jair Bolsonaro al despedir al director de la Policía Federal
El ala militar del gobierno de Jair Bolsonaro entró en crisis con la renuncia de Sergio Moro como ministro de Justicia y Seguridad Pública anunciada el viernes. De acuerdo al diario Folha de S. Paulo, una de las opciones sobre la mesa de la cúpula militar es el retiro del apoyo al actual presidente.
De acuerdo con la misma fuente, dos episodios de la crisis contrariaron a los militares y aumentaron la presión que existe para que presenten su renuncia. El primero de ellos es que el despido del director de la Policía Federal, Maurício Valeixo, se publicó esta madrugada en el Boletín Oficial sin previa consulta a los uniformados, que estaban trabajando para persuadir a Moro de que no abandone el Gobierno.
“Se vieron traicionados por el modus operandi del presidente”, explica el artículo firmado por el periodista Igor Gielow.
Por otra parte, también el discurso de la renuncia emitido por Moro también “conmocionó” a los militares, al denunciar tentativas de “interferencia política” en asuntos judiciales por parte de Jair Bolsonaro.
Citando a un general del Ejército, Folha explica que no es difícil imaginar que Bolsonaro podría actuar de ese modo con el fin de proteger a su familia
“Los militares consideran que el presidente se aisló con los hechos ocurridos este viernes. En una conversación sobre los intentos de mantener la gobernabilidad, los militares afirmaron que el próximo Ministro de Justicia debería ser un abogado con una reputación intachable, sin conexiones políticas. Inicialmente, Bolsonaro rechazó la hipótesis”, continúa el artículo.
Por el contrario, ya ha trascendido que el presidente quiere que el actual jefe de la Secretaría General de la Presidencia, Jorge Oliveira, sea quien reemplace a Moro. El ministro, sin embargo, aún no aceptó la propuesta. Otro nombre posible es el del Fiscal Federal General, André Mendonça.
Además de la presión interna, el ejército está viendo crecer la insatisfacción del servicio activo con el manejo de la crisis del coronavirus por parte de Bolsonaro.
La fuente citada por el diario brasileño afirma además que el comandante del ejército, el general Edson Pujol, se entiende cada vez menos con el ministro de defensa, el general Fernando Azevedo.
Según un oficial general, la crisis aumentó la presión sobre los uniformados en el gobierno para que adopten una posición a favor o en contra de Bolsonaro. Moro, a diferencia de Paulo Guedes (Economía), es muy bien considerado entre los militares. /Infobae