El joven, un estudiante, pasó por alto la cuarentena. Asistió a un restaurante, a una discoteca y fue a su trabajo en un hotel.
La irresponsabilidad de un joven de 22 años portador de coronavirus lo llevó a no acatar la orden de aislamiento. Primero se fue a un local gastronómico, luego a un centro nocturno y finalmente fue a trabajar al día siguiente. El hecho ocurrió en el estado de Tasmania (Australia). Informó RT.
Un joven presentó síntomas similares al resfriado el 27 de febrero, un día después de que volviera a su país natal desde Nepal (pasando por Singapur), informó el director de servicios de salud pública de Tasmania, Marck Veitch. Sin embargo, el hombre siguió laborando y asistiendo a su centro de estudios.
Luego que los síntomas se agravaran, este viernes 6 de marzo el joven fue a un hospital de la zona, donde le hicieron pruebas y le indicaron que debía permanecer en aislamiento hasta que salieran los resultados. A pesar de las instrucciones, esa noche acudió a un local gastronómico y a una discoteca.
La tarde del sábado, su examen por COVID-19 salió positivo. De acuerdo al medio SBS News, este caso de coronavirus es el segundo registrado en el estado australiano.
Hasta el momento no se sabe por qué no hizo caso a los consejos de los especialistas, expresó Veitch. “Creemos que sí entendió las recomendaciones”, manifestó. Según cuenta el director de la entidad pública, “es inaceptable continuar las actividades en público o asistir al trabajo mientras se esperan los resultados de la prueba de coronavirus”.
Después de su retorno de Nepal, el hombre trabajó siete turnos en el hotel, aunque en algunos de ellos no tuvo acercamiento con los clientes. Además, se presentó a dos clases en su instituto.
Ahora el estudiante está en cuarentena en un nosocomio de la ciudad de Hobart, en condición estable. Por otro lado, cuatro miembros de su familia y tres de sus amigos también fueron puestos en aislamiento durante dos semanas. /LaRepública