El funcionario se paró frente a las cámaras de televisión para decirle a Venezuela lo que supuestamente Yanet Fermín y Fernando Orozco habían planificado, pero no presentó ninguna prueba contundente.
Durante 38 minutos del video donde el ministro de Comunicación, Jorge Jesús Rodríguez Gómez, trata de convencer al país de las razones para detener a los diputados Fernando Orozco y Yaneth Fermín, lo más claro que queda ahí es que el alto funcionario manipula con asombrosa habilidad lo que dijeron y lo que no dijeron los diputados.
Haciendo honor al estilo de Joseph Goebbels, ministro de propaganda de Hitler entre 1933 y 1945, con aquella frase “Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá”, el psiquiatra Jorge Rodríguez se paró frente a las cámaras de televisión para decirle al país lo que supuestamente los diputados de la Asamblea Nacional Yanet Fermín y Fernando Orozco, habían planificado. Repitió muchas veces: “tenemos las pruebas, las pruebas que les mostraremos, ustedes verán las pruebas”. Pero la verdad es que no hubo una sola prueba de que esos parlamentarios hubiesen hablado de asesinar a nadie y mucho menos de tener armas para asaltar cuarteles.
El único objetivo fue justificar la persecución contra los dos parlamentarios, que se suman a la lista de otros cuatro a quienes la ilegal y oficialista Asamblea Constituyente aprueba allanar su inmunidad parlamentaria. Es una estrategia que busca debilitar la elección de la directiva del próximo 5 de enero e imponer a uno de los diputados que han venido negociando con el Gobierno, principalmente Timoteo Zambrano.
Lo primero que hace Jorge Rodríguez es destacar que Juan Guaidó, el viernes 13 de diciembre “en avanzado estado de ebriedad” impidió “una operación de inteligencia del estado venezolano”, que se resume en que no logró la Dirección de Contrainteligencia Militar (DGCIM) detener a la diputada Yanet Fermín.
Recalcó el funcionario que “toda Venezuela está en paz, principalmente los niños y abuelos que están disfrutando de las navidades”, ocultando la gravísima crisis económica que está matando principalmente a esos sectores de la población.
En su discurso no dejaba de repetir que el partido Voluntad Popular es terrorista. Explicó que “la intención era con policías estadales del estado Sucre tomar, con armas, con un grupo de fusiles que iban a ser provistos por dos diputados suplentes de Voluntad Popular tomar dos unidades: el cuartel general Mariscal Sucre en el estado Sucre y el Comando Zonal de la Guardia Nacional Bolivariana Nr. 53 en Cumaná estado Sucre”.
Reiteró muchas veces que la intención era “generar un baño de sangre, para asesinar de ser posible a efectivos de la GNB o del glorioso ejército bolivariano, para generar un estado de desestabilización, para buscar la foto tenebrosa de la muerte del baño de sangre”.
Aunque Rodríguez insistió como una letanía “vamos a mostrar las pruebas”, en realidad sólo mostró videos del diputado Orozco, en un centro de trago y música, hablando de una conspiración para lo cual necesitaba armas y dinero.
Esa reunión fue grabada por el funcionario de la Policía de Sucre, alias Salamanca, que en un corto video, donde aparece entrevistado por un funcionario aparentemente de DGCIM, reconoce que él lo que “estaba era averiguando porque quería entrar al SEBIN”.
Pruebas manipuladas
No hay que hacer mayor esfuerzo para darse cuenta que el ministro manipula las pruebas que le presenta al país, afirmando que se dicen cosas que nunca dijeron.
Curiosamente Rodríguez esta vez no le puso nombre a la operación como siempre hace cada vez que habla de magnicidio, de terroristas o de intentos de golpe. Quizá porque parece risible que a alguien se le ocurra un golpe de Estado tomando a dos unidades militares poco relevantes y bastante alejadas del centro de poder.
Mostró lo que llamó la célula terrorista, encabezada por Leopoldo López. “Cada vez que usted vea un intento de atacar o un asalto a un estamento militar en Venezuela o vea situaciones puntuales de violencia que intentan desencadenar situaciones de desestabilización, ahí está Leopoldo López y el gobierno de Iván Duque”.
Enfatizó: “Tenemos las pruebas de cómo iban a ingresar desde Colombia 300 fusiles que se iban a utilizar por células terroristas conjuntas de efectivos paramilitares colombianos y efectivos de venezolanos violentos que se encuentran entrenados en campamentos paramilitares en Colombia”. Pero nunca mostró esas pruebas.
Agregó que “con esos fusiles se iba a generar una situación que Leopoldo López le encomendó a Juan Guaidó, quien recurrió a los oficios de la diputada suplente de VP Yanet Fermín alias Manuelita. Lo que iban a procurar era el asalto el 15 de diciembre de dos unidades militares”.
“Yanet Fermín alias Manuelita recurrió al trabajo del diputado suplente Fernando Orozco (VP) alias Oro Negro, quien reclutó a dos efectivos de la Policía del estado Sucre: Sixto Salamanca alias Soublette 9 (capturado el día de ayer) y José Miguel Yeguez alias Cazador (también capturado)”.
“La diputada Fermín se dirigió a Cúcuta donde se reunió con Lester Toledo y con Josnar Baduel, éste último se compromete al ingreso de dinero y de fusiles para perpetrar acciones terroristas”.
Rodríguez dice que “todas las reuniones habían sido develadas por nuestros organismos de inteligencia”.
Ahora bien, Rodríguez no logra demostrar nada de eso. Hay que ser demasiado ingenuo para creer que dos policías podían encabezar la toma de dos unidades militares, sin armas y sin dinero.
Está desinformado el psiquiatra. No sabe que Lester Toledo está ocupado en otras actividades con el presidente de un gobierno de la región, que no es precisamente Duque. Es una incongruencia asumir que el hijo del general Baduel puede financiar una operación así cuando hay muchos testimonios de la difícil situación económica que los hijos del ex ministro de la Defensa tienen en Colombia.
El diputado
Lo más risible son los cortos videos presentados por el ministro chavista donde muestra al diputado Orozco, a quien se le ve diciendo: “Yo estoy en el trabajo de buscar recursos”, deja claramente establecido que alias Salamanca le plantea la necesidad de buscar 30 fusiles. “Tenemos cuerpos en seis estados para que se levanten en armas”.
Si los diputados Orozco y Fermín planteaban la toma de dos cuarteles para el 15 de diciembre, con qué iban a hacerlo si el diputado está reconociendo, unos días antes, que están buscando las armas.
Pero Rodríguez asegura, como si le hablara a una audiencia torpe, que el diputado dice que tiene 30 fusiles, que van a asesinar guardias nacionales, que tomarán dos cuarteles, que le dieron 150 fusiles y explosivos. Miente descaradamente porque el diputado dice claramente que alias “Salamanca le está solicitando 30 fusiles y comida para la familia”. Nunca dice que los tiene ni siquiera cómo los va a conseguir.
Sin el menor desparpajo, el ministro de comunicación de Maduro asegura que Orozco, reunido con Salamanca y Yeguez el 5 de diciembre, “expone que cuentan con 30 fusiles, con los cuales van a tomar el cuartel Mariscal Sucre y el Comando de la Zona 53 de la GNB, generar un baño de sangre, asesinar efectivos militares, robar el parque de armas”. Su estrategia es posicionar en la audiencia una mentira que repite varias veces.
Lo otro asombroso es que dice que el diputado “también menciona que los recursos para estos actos provienen de Cúcuta, es decir que es la plata que los gringos y el gobierno de Duque tienen en Cúcuta para financiar todos los actos terroristas”. Si los lectores oyen la grabación se darán cuenta que Orozco menciona lo del dinero de Cúcuta solo para referirse al problema que hay en la oposición luego de las denuncias sobre el destino de esos dineros.
El policía y la diputada
En un video Sixto Salamanca, policía del estado Sucre, dice en la reunión con Orozco que se están organizando para la toma del cuartel “lo que nos hace falta es armamento para poder tomar”. Asegura que han pensado en apoderarse del parque de armas y llevar todos los fusiles a la Guarnición.
Pero Rodríguez lo interpreta diciendo que él plantea acribillar a los militares mientras están dormidos. Luego explica que el 10 de diciembre hubo reunión entre los diputados Orozco y Yanet Fermín y el policía Sixto Salamanca.
“Esta señora Yanet Fermín es la que da la orden para que se perpetre el asalto a dos cuarteles militares en el estado Sucre”, dice Rodríguez mientras enseña un video donde se oye a la diputada hablar de cosas totalmente distintas y jamás menciona nada relacionado con los cuarteles ni con las armas.
Jorge Rodríguez incluso asegura que el diputado Orozco habló, en los videos mostrados, de las reuniones de Yanet, Lester Toledo y Baduel para esa actividad. Lo cual es absolutamente falso, porque no se ve al diputado decir tal cosa.
Es evidente que Sixto alias Salamanca fue quien grabó el video donde aparece el diputado. No es casual que Rodríguez enseñe un video de ese funcionario policial de quien advierte que “prendió el ventilador salpicando a todos”.
Cuando alias Salamanca, quien aparece uniformado, empieza la grabación, se lee en la parte inferior el supuesto diálogo escrito que involucra a la diputada, pero que en honor a la verdad al policía no se le oye decir eso. Lo que sí expresa, no especificando a quien se refiere, es: “Me estuvo explicando que tiene un personal muy grande en Colombia, que están esperando las instrucciones para entrar a Venezuela. Él me manifiesta que la misión es tomar el estado y que mi misión pudiera ser de acompañarlos a ellos y armar un grupo en representación de un estado (Sucre) para la toma, él me nombra el cuartel Antonio José de Sucre. Yo le dije que sí, que yo lo podía tomar. Que me iba a poner en contacto con una persona encargada de la logística, de entregarme el armamento y es el mismo que hace la distribución de los armamentos en diferentes estados según me dijo Mariño y Orozco”.
Dice que en la reunión él se enteró que Orozco es diputado de la Asamblea Nacional. Imagínese tamaña conspiración.
Lo insólito es que Jorge Rodríguez demuestra con ello la mejor prueba de manipulación de la que ha hecho gala hasta ahora. No es que trata de disfrazar la verdad, es que miente descaradamente.
Sin duda ese video es una pieza digna de analizar, que dejaría pálido al mismísimo ministro alemán Joseph Goebbels. /Infobae