Al menos 15 personas han muerto y 26 han resultado heridas en los incendios forestales que arrasan diferentes partes de Argelia, según los medios estatales, a medida que la ola de calor se extiende por la región.
Citando un comunicado del Ministerio del Interior, la agencia de noticias APS también dijo el lunes que al menos 1.500 personas habían sido evacuadas en el norte del país.
APS también informó que al menos 10 soldados murieron en la región de Beni Ksila, según una declaración separada del Ministerio de Defensa. No quedó claro de inmediato si los soldados formaban parte del número de muertos citado por el Ministerio del Interior.
El presidente Abdelmadjid Tebboune ofreció sus condolencias a las familias de las víctimas, tanto civiles como personal de seguridad.
Unos 7.500 bomberos y 350 camiones con apoyo aéreo luchaban para controlar las llamas en todo el país, dijeron las autoridades, incluso en las regiones de Boumerdes, Tizi Ouzou, Jijel y Skikda. Cuando las temperaturas alcanzaron los 48 grados centígrados (118 grados Fahrenheit), Argelia registró 97 incendios avivados por fuertes vientos en 16 provincias, dijo el Ministerio del Interior.
Se estaban realizando operaciones para extinguir incendios en seis provincias, agregó el ministerio, y pidió a los ciudadanos que “eviten las áreas afectadas por los incendios” y que informen sobre nuevos incendios a través de números de teléfono gratuitos.
Los incendios arrasan regularmente los bosques y los campos de Argelia en verano. Este año, se han visto exacerbados por una ola de calor que ha visto a varios países mediterráneos batir récords de temperatura. En la vecina Túnez, las temperaturas del lunes se acercaron a los 50C (122F).
La semana pasada, un gran incendio se desató en un bosque de pinos tunecinos cerca de la frontera con Argelia. Un cruce fronterizo tuvo que cerrarse temporalmente, según funcionarios tunecinos que confirmaron que se habían quemado 470 hectáreas (1.100 acres) de bosque. En mayo, las autoridades argelinas dijeron que se estaban preparando para los incendios forestales comprando y alquilando bombas de agua y construyendo pistas de aterrizaje para helicópteros y drones de extinción de incendios.
Los científicos clasifican a la región del Mediterráneo como un “punto caliente” del cambio climático y el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de las Naciones Unidas advierte sobre más olas de calor, malas cosechas, sequías, aumento del nivel del mar y afluencia de especies invasoras.
