Los legisladores peruanos dieron finalmente la luz verde al gabinete del izquierdista Pedro Castillo tras largas horas de debate en un Parlamento dividido y donde el partido del nuevo mandatario cuenta con poca representatividad. En las calles de Lima ciudadanos contrarios al mandatario protestaron contra la confirmación del gabinete.
Tras dos sesiones plenarias de 13 horas y una fuerte polarización, finalmente el Congreso peruano dio su aval al Gobierno del presidente Pedro Castillo. El gabinete, presidido por Guido Bellido, tiene ahora luz verde, a pesar de una fuerte oposición en el Parlamento.
La aprobación del gabinete, con 73 votos a favor, 50 en contra y ninguna abstención, da al partido de Pedro Castillo un respiro después de un difícil primer mes en el cargo para el mandatario de izquierda, quien llegó a la Presidencia con escasa experiencia política.
El partido de Castillo, la formación marxista Perú Libre, ocupa sólo una minoría de escaños en el Congreso.
Previo a la votación, cientos de personas se manifestaron en las calles de Lima para expresar su inconformidad contra la formación del gabinete y para pedir que los congresistas no dieran su visto bueno a los ministros elegidos por Castillo.
Las polémicas que rodean el nombramiento del primer ministro de Perú
El Legislativo cuenta con una mayoría opositora de derecha y desde un inicio el equipo ministerial designado por el mandatario de izquierda ha enfrentado un fuerte rechazo dentro y fuera del partido gobernante. Varios de sus ministros están salpicados por controversias e investigaciones judiciales.
Uno de los más fuertes desacuerdos se produjo por el nombramiento de Guido Bellido como primer ministro. El político de 41 años está siendo investigado por la Fiscalía por presunta apología al terrorismo, tras manifestar públicamente su apoyo al grupo Sendero Luminoso.
Además, recientemente el ente acusador abrió otra investigación en su contra por presunto lavado de activos.
Bellido también ha sido criticado por legisladores de distintas corrientes políticas por escribir en el pasado, mediante sus redes sociales, frases homofóbicas y machistas.
Fue justamente la designación de Bellido el motivo por el que a última hora los confirmados ministros de Economía, Pedro Francke, y de Justicia, Aníbal Torres, dudaron de aceptar sus cargos y se rehusaron a jurar con el resto de ministros a finales de julio, lo que dejó ver las disputas al interior del propio gabinete.
Tanto el nuevo ministro de Economía, como el de Justicia rechazaron la designación de Bellido. De hecho, esta fue la razón por la que a última hora dudaron de aceptar el cargo y se rehusaron a juramentar el jueves con el resto de ministros.
La designación de Bellido como jefe de ministros también fue rechazada por tratarse de una de las figuras más cercanas a al fundador del partido oficialista, Vladimir Cerrón, un neurocirujano que se declara marxista y admirador de los Gobiernos de Cuba y Venezuela. Él no pudo postularse para la Presidencia ni asumir un puesto en el gabinete debido a que enfrenta cargos por corrupción.
Cerrón también es indagado por la Justicia en el caso de lavado de activos en el que Bellido está salpicado.
Los otros ministros cuestionados
Aunque Guido Bellido y Vladimir Cerrón son las figuras más destacadas de Perú Libre en la mira de las autoridades, no son las únicas.
La designación del abogado Iber Maraví como ministro de Trabajo también ha sido foco de inconformismo. Si bien el funcionario se dio a conocer en el sector de la educación de su país por su amplia trayectoria, también ha sido blanco de señalamientos por sus presuntos vínculos con Conare-Sutep, una facción del magisterio cercana al Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), definido por la Policía y la Fiscalía como el brazo legal del grupo terrorista Sendero Luminoso.
Otro rechazo recae en el nombramiento del abogado Walter Ayala como nuevo ministro de Defensa, quien fue sancionado por inconducta funcional. Fue destituido como presidente del Comité de Ética del Colegio de Abogados de Lima (CAL), en 2019, por haber dispuesto la suspensión de la colegiatura del exfiscal supremo Pedro Gonzalo Chávarry, investigado por el caso Los Cuellos Blancos del Puerto.
Hernando Guerra-García, vocero del partido de la excandidata presidencial Keiko Fujimori, quien perdió los comicios de junio ante Castillo, afirmó en conferencia de prensa que se había “elegido quizá al gabinete más mediocre de la historia republicana” y que su partido Fuerza Popular iba a ser “un muro de contención ante los impulsos totalitarios, ante su improvisación y falta de preparación”.
Durante el primer mes en funciones del nuevo gabinete varios legisladores pidieron al presidente que cambiara su equipo ministerial.
Finalmente, con el voto de confianza otorgado por el Congreso peruano este viernes al gabinete termina un mes de incertidumbre frente a los nombramientos, pero las discrepancias al interior de su Gobierno se mantienen, así como las investigaciones de las autoridades contra algunos de sus miembros. Se prevé una Administración cargada de obstáculos.