En medio de este panorama de inseguridad, algunos venezolanos saben que correr el riesgo de adentrarse en el mar es el único modo de alimentar a sus familias
Desesperados por alimentar a sus familias en medio de la pandemia de coronavirus y la severa crisis que azota a la nación caribeña, decenas de venezolanos desafían el mar abierto en frágiles cámaras neumáticas, armados apenas con un anzuelo y un sedal.
Un pequeño pero creciente número de personas en la ciudad costera de La Guaira, a sólo unos minutos de Caracas, la capital, han tenido que recurrir a la pesca mientras el confinamiento nacional mantiene paralizada una economía que ya se mostraba deprimida.
El COVID-19 golpeó a Venezuela a mediados de marzo y el régimen de Nicolás Maduro ordenó el cierre de la mayoría de las empresas. Las cifras oficiales que muestran las autoridades chavistas dicen que el coronavirus ha matado a menos de 300 personas y ha enfermado a unas 31.000.
Dos venezolanos se alistan en las costas de La Guaira antes de lanzarse al Mar Caribe en cámaras de aire con el propósito de pescar el alimento que llevarán luego a casa.
En medio de este panorama de inseguridad, algunos venezolanos prefieren practicar la pesca menor desde la seguridad del muelle de La Guaira, pero otros, aunque temen al mar abierto y a las corrientes que pudieran arrastrarlos sobre sus frágiles cámaras de aire, saben que correr el riesgo es el único modo de alimentar a sus familias.
Uno de sus temores es que alguno de sus anzuelos pueda perforar accidentalmente su cámara de aire, y por eso llevan tiras de goma para improvisar parches de emergencia en caso de un pinchazo. No les queda de otra que adentrarse en el mar porque ahí es donde nadan los peces más grandes.
Para regresar a la costa están obligados a remar contra las corrientes. Es agotador. Luego, con su carga a cuesta, caminan varios kilómetros hasta sus casas, descalzos, pero seguros de que un buen día de pesca puede alimentar a sus familias durante una semana e incluso, les dará para compartir algo con sus vecinos. /Con información de AP