Aproximadamente 100 presos se fugaron de los calabozos de la Policía del estado Yaracuy, en el centro occidente de Venezuela, en horas de la madrugada del sábado 1 de agosto. Los prófugos estaban detenidos en la Comandancia General de la policía.
Extraoficialmente se conoció que los prófugos realizaron un boquete que los conectó con la red de cloacas y alcantarillado de San Felipe, capital de ese estado.
Los reclusos aparentemente salieron en medio de la oscuridad hacia diversas zonas de la ciudad. Las minutas policiales dieron a conocer que algunos fueron vistos dos cuadras de la comandancia y otros en un parque ubicado a diez cuadras del lugar.
Además, se reportó que en horas de la mañana las autoridades policiales se percataron de la situación y de la fuga de los presos. Inmediatamente iniciaron el conteo y la misión de recaptura.
El equipo del Observatorio Venezolano de Prisiones intentó acercarse hasta las instalaciones de la comandancia policial, pero ésta estaba tomada por funcionarios de diversos cuerpos de seguridad del estado. Las autoridades no ofrecieron ningún tipo de información sobre los hechos. Algunos familiares también acudieron al lugar para intentar acceder a un listado de los prófugos, pero no les prestaron atención.
Los funcionarios lograron recapturar a 30 de los presos, de los cuales algunos estaban heridos. Los familiares denunciaron al equipo de OVP que temen por la vida de los detenidos, piden que se les respete su integridad y exigen información sobre lo sucedido.
Hasta horas de la tarde del sábado solo se conocía que estaban realizando un conteo detallado y una requisa profunda a fin de conocer el número exacto de evadidos que podría sobrepasar los 100. /Con información del Observatorio Venezolano de Prisiones