El gobierno de Estados Unidos considera que el camino hacia el cambio democrático en Venezuela no será sencillo. En sus declaraciones, el portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel, señaló que si bien Estados Unidos da la bienvenida al diálogo y la buena fe, “tenemos claro que el cambio democrático no será fácil y ciertamente requiere un compromiso serio”.
Pese a que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció la reanudación de las conversaciones con Washington, el gobierno estadounidense se mantuvo cauto en sus comentarios. Patel enfatizó que la “plena implementación del acuerdo de Barbados es el mejor camino para restaurar la democracia que los venezolanos merecen, mejorar las condiciones económicas y humanitarias y abordar la crisis migratoria”.
Las negociaciones del año pasado entre Estados Unidos y Venezuela se dieron en paralelo a un diálogo entre el gobierno y la oposición venezolana en Barbados, en un intento por definir las condiciones de las próximas elecciones presidenciales, en las que Maduro aspira a un tercer mandato.
A pesar de los avances alcanzados, el gobierno estadounidense ha mantenido su postura cautelosa, reimponiendo sanciones en respuesta a la inhabilitación de la principal líder opositora, María Corina Machado. Este escenario refleja la complejidad y los desafíos que enfrenta Venezuela en su camino hacia la democracia.