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Estados Unidos se pone en alerta máxima
Estados Unidos cree que ha llegado el momento decisivo en la crisis entre la OTAN y Rusia con Ucrania como tablero de movimientos. «Nos encontramos en un momento en el que la invasión puede empezar en cualquier instante. Y para ser claros, eso incluye durante los Juegos Olímpicos», ha asegurado este viernes el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken. Estados Unidos ya descarta que la celebración de los Juegos de Invierno en Pekín -que acaban el próximo domingo 20 de febrero- pueda detener los hipotéticos planes de Putin de desatar un conflicto en Ucrania.
Horas antes, el presidente Joe Biden apareció en una entrevista en la NBC en la que urgió a los ciudadanos norteamericanos en Ucrania a «abandonar inmediatamente» el país. «Las cosas se pueden volver locas muy rápidamente», abundó Biden, que esta tarde mantiene una reunión de urgencia con líderes de la OTAN para analizar la situación.
Blinken, durante su visita a Australia, añadió además que la OTAN sigue detectando «preocupantes signos de escalada por parte de Rusia, incluyendo nuevas tropas que están llegando a las fronteras de Ucrania».
La preocupación de Estados Unidos se ha recrudecido tras una semana de fracasos diplomáticos. La visita de Macron a Putin se saldó sin ningún avance visible, y acabó marcada por la imagen de extrema frialdad que transmitió el Kremlin al sentar al dirigente francés en un extremo de una mesa de 4 metros. La explicación oficial que ha trascendido es que la delegación francesa se negó a someterse a una PCR realizada por el séquito de Putin.
No ha sido el único traspiés de los últimos días. El más sonado se produjo en Berlín, donde las delegaciones negociadoras de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania abandonaron una reunión de nueve horas sin ningún acuerdo y sin perspectivas de volver a reunirse. Al mismo tiempo, la secretaria británica de Asuntos Exteriores, Liz Tuss, se reunía en Moscú con su homólogo Sergei Lavrov. Una conversación que la parte rusa definió a su término como «un diálogo entre sordos y mudos».
Occidente sigue amenazando con sanciones a Rusia, mientras Rusia exige que cese el envío de armas a Ucrania. Lo que no se detiene son las mega maniobras conjuntas que estos días ya están ejecutando Rusia y Bielorrusia en la frontera norte de Ucrania, y que se espera que finalicen precisamente el mismo día que los Juegos Olímpicos de Pekín 2022.
Los ejercicios, los mayores de este tipo realizados en la historia de forma conjunta entre ambos países, involucran a decenas de miles de soldados, sistemas de misiles tierra-aire, sistemas de defensa aérea y cazas de combate.
En total, el despliegue de tropas rusas en las fronteras ucranianas es de más de 130.000 soldados, la mayor concentración de este tipo desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Al mismo tiempo, Rusia también está ejecutando maniobras y despliegues en el Mar Negro usando puertos de Crimea, cuya anexión en 2014 dinamitó el fino equilibrio mantenido entre ambos países en las últimas décadas.
Rusia mantiene su demanda de que la OTAN renuncie a incorporar a Ucrania y repliegue sus fronteras a las de los años 90. Una posición inaceptable para la Unión Europea pues involucraría, entre otros países, a Polonia, Rumanía y los Estados bálticos: Estonia, Letonia y Lituania. Las fuerzas de la OTAN ya han redoblado su presencia en los últimos días en estas áreas y también en Bulgaria, donde España se comprometió a enviar cazas.
Los cazas españoles ya están en Bulgaria
Los cuatro aviones Eurofighter del Ala 14 del Ejército del Aire han despegado este viernes de la Base Aérea de Albacete para sumarse a las misiones de disuasión de la OTAN en su flanco este desde la base de Graf Ignatievo.
Se trata de un contingente formado por un total de 130 militares. Parte de ellos viajaron a Bulgaria hace ya días para preparar los requerimientos logísticos y los cuatro Eurofighter que han llegado este viernes completan el despligue, bajo el nombre de Destacamento Aerotáctico Strela.
Dada la polémica suscitada por la participación española en la crisis de Ucrania, el Ministerio de Defensa subraya que el despliegue se enmarca dentro de las actividades habituales de las Fuerzas Armadas «en cumplimiento de los compromisos internacionales de España, en beneficio de la disuasión y de la defensa de los países de la OTAN».