Un hombre de Biella, Italia, se presentó a su cita de vacunación con dos brazos de gomaespuma escondidos debajo de un corsé de teatro, en un intento de obtener un pase de vacunación sin vacunarse realmente, según The New York Times.
Filippa Bua, la enfermera con ojos de águila que administró la inyección, le dijo a The Times que cuando el paciente se sentó, se tiró ligeramente de la sudadera, creando un pequeño espacio donde su camisa y el brazo de gomaespuma eran visibles para la vacuna.
“El color del brazo me hizo sospechar y le pedí al hombre que descubriera el resto de su brazo izquierdo. Estaba bien hecho, pero no era del mismo color”, dijo Bua a La Repubblica, según The Guardian.
The Guardian también informó que Bua se detuvo cuando no pudo ver las venas del hombre.
“Estaba hecho de espuma de goma”, dijo Bua, y agregó que estaba “bastante bien hecho”.
Bajo lo que The Times describió como un “corsé de teatro grueso”, el hombre, que no fue identificado, supuestamente usó dos brazos de gomaespuma como un medio para obtener un pase de vacuna después de que Italia anunció la semana pasada que las personas tendrán que mostrar prueba de vacunación . o el Green Pass, en bares y restaurantes a partir del lunes.
Se han producido protestas en todo el país por las nuevas medidas.
Italia fue el primer país de Europa en exigir vacunas para los trabajadores de la salud y, según las nuevas reglas, los trabajadores como maestros, oficiales de policía y otro personal hospitalario deberán estar completamente vacunados para mantener sus trabajos también.
La BBC informó que el hombre no identificado era un trabajador de la salud que había sido suspendido de su trabajo por no estar vacunado.
Según The Times, a medida que la elegibilidad para vacunas se ha ampliado en Italia, cerca del 13% de los adultos aún no han recibido una sola inyección con un aumento de meses en los casos y una renovada preocupación por la variante Omicron.
Aunque la estrategia del hombre de los brazos de espuma fracasó, Bua dijo que estaba “agradable y sereno” después de ser capturado, pero las autoridades del hospital informaron el incidente a la policía local y está siendo investigado por fraude, según la BBC.
Alberto Cirio, presidente de la región de Piamonte donde se asienta Biella, dijo que lo sucedido fue “de enorme gravedad, inaceptable dado el sacrificio que está soportando nuestra comunidad a causa de la pandemia”.
A Bua tampoco le gustó el truco mal velado.
“Fue tan humillante”, dijo Bua a The Times, “pensar que una enfermera no puede distinguir entre la espuma de goma y la piel”.
“Me sentí ofendido como profesional”, dijo Filippa Bua a La Repubblica. “El color del brazo me hizo sospechar y le pedí al hombre que destapara el resto de su brazo izquierdo. Estaba bien hecho, pero no era del mismo color”. El hombre le dijo: “¿Te habrías imaginado que yo tendría tal físico?”