El administrador de la Ciudad de Miami, Art Noriega, comenzó el proceso de despido del asediado jefe de policía Art Acevedo
Poniendo fin a semanas de especulaciones y tumultos en el Ayuntamiento y después de un par de audiencias públicas, casi de circo, en las que los comisionados arremetieron contra el jefe por todo, desde una declaración equivocada que hizo sobre la “mafia cubana”, hasta la ropa ajustada que usó durante una recaudación de fondos en otra ciudad.
Técnicamente, Noriega suspendió a Acevedo en espera de su despido, dándole la opción de renunciar o tener una audiencia ante los cinco comisionados de la ciudad, la mayoría de los cuales han cuestionado públicamente su breve período de seis meses al frente del departamento.
La suspensión se produjo tres semanas después de que Acevedo enardeciera a la comisión de la ciudad, de mayoría cubanoamericana, acusándola de interferir en las investigaciones policiales y de comparar sus acciones con la Cuba comunista. Su breve mandato ha estado lleno de decisiones controvertidas y errores, como posar para una foto con uno de los líderes del sur de Florida del movimiento nacionalista blanco Proud Boys.
Noriega emitió un comunicado el lunes por la noche en el que decía que la situación entre Acevedo, de 57 años, y la ciudad se había vuelto “insostenible”.
“En particular, la relación entre el Jefe y el Departamento de Policía que dirige, así como con la comunidad, se ha deteriorado sin remedio”, escribió Noriega. “Las relaciones entre empleadores y empleados se reducen al ajuste y al estilo de liderazgo y, desafortunadamente, el Jefe Acevedo no es el adecuado para esta organización”.
Pocos momentos antes de que Noriega emitiera su declaración, Acevedo envió un mensaje contradictorio al personal superior y a los 1,300 oficiales policiales juramentados de la ciudad diciendo que había sido un “privilegio servir con ustedes y luchar por ustedes”, sin decir que había renunciado.
“Prometo continuar la buena lucha para librar al MPD [Departamento de Policía de Miami] de la interferencia política del Ayuntamiento que, lamentablemente, sigue afectando negativamente a esta organización”, dijo Acevedo.
Aunque varios comisionados de la ciudad pasaron semanas criticando a Acevedo por despidos, contrataciones y degradaciones dentro del departamento, solo el comisionado Alex Díaz de la Portilla pidió el despido del jefe antes del lunes.
“El resultado natural de un jefe de policía arrogante y deshonesto fue que lo despedirían”, dijo el comisionado. “Sus malas acciones hablan por sí solas. Como resultado, nuestra ciudad, nuestros oficiales de policía y nuestros residentes estarán mejor.
Si Acevedo se va pronto, será el período más corto de un jefe de policía en Miami en la memoria reciente: un final impactante para una figura nacional muy promocionada que vino de un departamento mucho más grande y a quien el alcalde de la ciudad se refirió como el “Michael Jordan o “Tom Brady” de los jefes de policía.
En apenas seis meses al mando, Acevedo enfureció tanto a los líderes de la ciudad con su falta de voluntad para inclinarse ante los comisionados que el jefe de Acevedo, el administrador municipal Art Noriega, no tuvo más remedio que expulsarlo.
Durante su breve mandato, Acevedo tomó el control de los asuntos internos, menospreció a la comunidad legal por la liberación anticipada de prisioneros y sentencias cortas, y despidió a la pareja de policías de mayor rango en el departamento por no reportar adecuadamente un accidente menor en el que se explotaron dos llantas. También degradó a cuatro mayores, incluida la segunda oficial negra de mayor rango en el departamento.
Acevedo posó “accidentalmente” para una foto con uno de los líderes locales del movimiento nacionalista blanco Proud Boys y se refirió a la gente que dirige el Departamento de Policía de Miami como la “mafia cubana”. El jefe luego se disculpó por la declaración, admitiendo que no sabía que era un término usado por Fidel Castro para pintar como criminales a los exiliados cubanos de Miami que se oponían a su dictadura.
Sorprendentemente, la relación de Acevedo con los comisionados siguió empeorando. Hace dos semanas, escribió un memorando a Noriega y al alcalde Francis Suárez acusando a los comisionados Joe Carollo, Alex Díaz de la Portilla y Manolo Reyes de interferir con las investigaciones policiales. El jefe también dijo que había informado a los investigadores federales y comparado las acciones del trío con la Cuba comunista.