Llega una eyección de masa coronal a la Tierra, con tormentas geomagnéticas de clase G1 a G2 de leves a moderadas
La mancha solar activa AR2882 entró en erupción el sábado 9 de octubre de 2021, produciendo una fuerte llamarada solar de clase M1.6 y una eyección de masa coronal o CME dirigida a la Tierra. Los meteorólogos del tiempo espacial del NWS-NOAA han modelado su trayectoria y han confirmado que probablemente llegará hoy el 11 de octubre, informa el experto Francisco Martín León en su blog de Meteored.
El impacto podría provocar tormentas geomagnéticas de clase G1 a G2. Si se materializa una tormenta G2 moderadamente fuerte, los observadores del cielo en los Estados Unidos podrían ver auroras tan al sur como una línea que conecta Nueva York con Oregón. Es probable que auroras se encuentren en latitudes altas en Europa, con una pequeña posibilidad de que alcancen latitudes medias, explica el meteorólogo y coordinador de la Revista del Aficionado a la Meteorología (RAM).
Es extremadamente improbable, sin embargo, que podamos ver auroras en España, añade Martín. En condiciones óptimas, podrían hacerse visibles desde latitudes como Tasmania en Australia, Escocia, el sur de Suecia y los estados bálticos. Los estados del norte de los EE. UU. También deben mantenerse alerta a medida que se acercan al anochecer en caso de que tengamos las condiciones esperadas de tormentas geomagnéticas.
Las erupciones solares son explosiones masivas de radiación electromagnética, plasma y partículas cargadas en la atmósfera exterior del Sol que se desencadenan por la repentina liberación de energía almacenada en los campos magnéticos que se producen alrededor de las manchas solares visibles.
Estas son el origen de las tormentas solares, que pueden suponer un peligro para los astronautas, las naves espaciales y los sistemas tecnológicos en tierra, como las redes de energía eléctrica y las radiocomunicaciones.
Primero, se produce la erupción solar. Estas explosiones masivas de radiación electromagnética se producen en las partes activas del sol, donde ocurre la reconexión magnética. En el momento de la erupción solar se pueden observar unas manchas negras en la superficie de la estrella, donde además comienzan los brotes de plasma.
Después, se produce la fulguración solar, que son aquellas radiaciones expulsadas por la estrella que abarcan un gran campo en el espectro. De hecho, pueden constar desde rayos gamma hasta ondas de radio. Estas viajan por todo el ancho del espacio y chocan con los cuerpos más cercanos. Únicamente tardan en llegar a la tierra, y generar sus consecuencias, 8 minutos.
Y la tercera etapa se llama “eyección de masa coronal”, momento en el que se expulsa plasma del sol. Si durante esta eyección, el plasma es expulsado en dirección de la tierra es cuando se pueden causar daños en los satélites y en telecomunicaciones. Sin embargo, ocurre que en la mayoría de los casos la atmósfera terrestre protege la tierra de estas radiaciones.