En una final de infarto, con diferencias de centésimas entre uno y otro y que varían cada vez que se actualiza el número de actas procesadas, Yaku Pérez, candidato del movimiento indígena Pachakutik, y Guillermo Lasso, de la alianza centro-derechista CREO-Partido Social Cristiano, batallan por estar en la segunda vuelta junto a Andrés Arauz, candidato del correísmo, que se alzó con el triunfo, con 32,14%, aunque distante de la cifra que apostaba su movimiento Unión por la Esperanza (UNES), que aseguraba sobrepasaría el 40%.
Al cierre de esta edición, cuando se habían escrutado 39.204 actas (98,05%), la disputa entre Pérez y Lasso es voto a voto. Pérez tiene 19,86% y Lasso, 19,60%. Las cifras que obtengan en el exterior, sobre todo de los ecuatorianos que viven en Europa y Estados Unidos, serán determinantes. De hecho, Lasso ha señalado que esperará hasta que el Consejo Nacional Electoral (CNE) dé los resultados; mientras que Yaku Pérez ha denunciado inconsistencias y hasta ha hablado de que le quieren «birlar» el triunfo. Asegura que tienen pánico que pase a la segunda vuelta, porque saben que ellos tienen un techo, en cambio «nosotros podemos crecer», dice, al compararse con las candidaturas «del señor de Bélgica, y del señor de la banca», en alusión a Correa, que vive en Europa (aunque siguió las elecciones desde México) y auspicia a Arauz; y a Guillermo Lasso, como exbanquero.
La del domingo fue una jornada demasiado tranquila, para ser cierta. En un país acostumbrado a hechos excepcionales en cada elección, algo debía ocurrir. A las 17:00 las encuestas a pie de urna dieron como ganadores para ir a la segunda vuelta a Andrés Arauz y a Guillermo Lasso. El tercer lugar era para Yaku Pérez y el cuarto, con una votación inesperada, para Xavier Hervas, de Izquierda Democrática, que se hizo popular con sus vídeos en Tik Tok. A Yaku le daban 17,99% y a Hervas 16,7%. La información era creíble porque provenían de dos encuestadoras distintas y conocidas; la una identificada con el correísmo y la otra cercana a Lasso.
Tras los anuncios, llamó la atención que Guillermo Lasso no se pronunciara, después de que Arauz agradeciera al país la victoria que lo ponía como primero en la segunda vuelta, y dejaba a Pérez como «gran elector» junto a Hervas, quien, con su alta votación, acababa de resucitar a la otrora poderosa socialdemocracia en Ecuador. A las 19.30 se supo que el CNE, que había anunciado que a las 20:00 daría las cifras del conteo rápido (cifras reales) postergó su anuncio para las 21:00. Hubo inquietud, pero nada grave porque siempre hay «un retraso».
Tras los anuncios, llamó la atención que Guillermo Lasso no se pronunciara, después de que Arauz agradeciera al país la victoria que lo ponía como primero en la segunda vuelta
Confusión de datos
Pero cuando Diana Atamaint, la indígena amazónica que preside el CNE, asomó a las 21:00 en los medios soltó una bomba. Anunció las cifras de los resultados y, el segundo lugar era para el candidato de Pachakutik, Yaku Pérez. La diferencia era de siete centésimas: 20,04% frente a 19,97%. El país enmudeció sobre todo por la mínima diferencia y porque la muestra de las actas contabilizadas fue de 2.200, inferior a las 2.400, al que se había acordado en el organismo, de acuerdo a la técnica. La tensión subió de tono cuando, en pocos minutos, en un canal de televisión, el vicepresidente del CNE, Enrique Pita, mostró el resultado de 200 actas adicionales a las que presentó Atamaint, y allí volvía a estar Lasso en segundo lugar. Habló de un «empate técnico» y de esperar el conteo oficial. /Con información de AlbertoNews