Tres miembros de las Fuerzas Armadas de Perú murieron y otros tres resultaron heridos en una emboscada perpetrada por el remanente del grupo armado Sendero Luminoso que se mantiene activo en su reducto del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), en el sur de los Andes peruanos.
El atentado contra las fuerzas del orden ocurrió el jueves, cuando varias patrullas se habían infiltrado en el territorio del grupo subversivo como parte de una operación llamada “Ojo de águila”, según informaron en un comunicado conjunto los ministerios de Interior y Defensa.
Durante ese operativo, una patrulla fue víctima de varias minas puestas en el camino por el remanente de Sendero Luminoso, cuyos miembros atacaron a los militares y policías una vez que explosionaron.
Producto de ello murieron en el acto el suboficial del Ejército del Perú Gersson Cabrera y el suboficial de la Policía Nacional Haddler Lázaro.
Entre los cuatro heridos que fueron evacuados del lugar de la emboscada estaba el capitán del Ejército Luiz Marzal, que falleció este viernes producto de una descompensación y un paro cardíaco súbito, según indicaron los ministerios en otro comunicado.
El atentado tuvo lugar en el sector llamado Banderita, que se encuentra en el municipio de Canayre, perteneciente a la sureña región de Ayacucho, una de las zonas del VRAEM donde más enfrentamientos han acontecido entre militares y miembros de la organización subversiva en los últimos años.
El resto de heridos se encuentran en el centro médico de emergencias de Pichari, en la vecina región de Cusco, donde se mantenían estables, según la información brindada por el Gobierno.
El VRAEM es el último escenario activo del sanguinario conflicto armado interno (1980-2000) desatado en Perú por el grupo maoísta Sendero Luminoso y el marxista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), que causó unos 69.000 muertos, según el informe final de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación (CVR).
Además de servir de escondite de los subversivos, el VRAEM es la principal cuenca cocalera de Perú, donde está la mitad de las más de 50.000 hectáreas de cultivos ilícitos de hoja de coca que existen en el país, y que producen el 70 % de las más de 400 toneladas de cocaína que se exportan anualmente desde Perú.
Se trata de una amplia zona de selva montañosa en la vertiente oriental de los Andes que abarca parcialmente hasta cuatro regiones del territorio peruano.
Este remanente de Sendero Luminoso se ha autodenominado en los últimos años como el Militarizado Partido Comunista del Perú (MPCP) y está liderado por los hermanos Víctor y Jorge Quispe Palomino (“camarada José” y “camarada Raúl”, respectivamente), sin que las autoridades conozcan con exactitud cuántos hombres tienen bajo su mando, aunque se estima que son entre uno y dos centenares.
Estos cabecillas se hicieron con el control de Sendero Luminoso en el VRAEM a fines de los años 90, cuando toda la cúpula de la organización fue capturada.
Sin embargo, el fundador de Sendero, Abimael Guzmán, que cumple cadena perpetua en una base naval, no los reconoce como tales y ellos no siguen órdenes del apodado “presidente Gonzalo”.
No obstante, antes de la captura de Guzmán en 1992, los dos hermanos participaron en varios actos criminales de Sendero en su sanguinaria cruzada por imitar la guerra popular de China e instalar en Perú un régimen maoísta. /Con información de EFE
