Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda instaron este domingo a Hong Kong en un comunicado conjunto a celebrar elecciones lo antes posible, advirtiendo a las autoridades sobre las medidas para “socavar el proceso democrático”.
Su declaración se produjo cuando los legisladores chinos se reunieron para decidir los próximos pasos después de que las elecciones al Consejo Legislativo de Hong Kong previstas para el 6 de septiembre se aplazaran un año debido al coronavirus.
Los ministros de relaciones exteriores de los cinco países dijeron que estaban “gravemente preocupados por la injusta descalificación de candidatos por parte del gobierno de Hong Kong y el aplazamiento desproporcionado de las elecciones al Consejo Legislativo”.
“Estas medidas han socavado el proceso democrático que ha sido fundamental para la estabilidad y la prosperidad de Hong Kong”. Instaron “al gobierno de Hong Kong a celebrar las elecciones lo antes posible”.
La jefa ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, ha dicho que sería pragmático ampliar el mandato de la actual legislatura. Pero hay un interrogante sobre qué hacer con cuatro legisladores de la oposición a los que se les ha prohibido buscar la reelección.
Los cuatro legisladores pro-democracia fueron descalificados por violar una nueva ley de seguridad nacional al pedir sanciones internacionales contra Beijing y Hong Kong. En su declaración, los cinco ministros de relaciones exteriores pidieron que se restituyeran los legisladores descalificados.
También, los cinco países (que comparten información de inteligencia en el marco de la asociación “Cinco Ojos”) señalaron que la ley de seguridad estaba “erosionando los derechos y libertades fundamentales del pueblo de Hong Kong”.
“Apoyamos las expectativas legítimas del pueblo de Hong Kong de elegir a los representantes del Consejo Legislativo a través de elecciones genuinamente libres, justas y creíbles”, añadieron.
Ya el viernes, los Estados Unidos impuso sanciones a un grupo de funcionarios chinos y de Hong Kong, incluido el líder de la ciudad, Lam, que participaban en la aplicación de la controvertida ley de seguridad. /Con información de AFP