Un obstáculo tras otro. Así ha sido el camino de la reactivación de la refinería El Palito en Puerto Cabello, Carabobo. Según una fuente interna de Pdvsa, el centro de refinación se encuentra en contingencia debido a que continúa dañado el sistema de bombeo de la cuenca del río Sanchón, encargado de suministrarle el agua necesaria para todos los procesos.
Ante la incapacidad de bombearle a El Palito los al menos 600 mil litros de agua que requiere diariamente, las fallas en las torres de enfriamiento persisten y ponen en riesgo la continuidad de la producción. Es un deterioro generalizado que impide el aumento del procesamiento, actualmente ubicado en menos de 30% de su capacidad instalada, equivalente a unos 37 mil barriles diarios (bd).
En un intento de paliar la contingencia del suministro de agua en la refinería, la estatal petrolera habría tomado la decisión de conectarse a una tubería de 33 pulgadas proveniente de Canoabo, al occidente del estado, que funge como principal fuente de agua de la cual se abastecen casi todos los sectores de Puerto Cabello, detalló la fuente.
Los habitantes de la costa carabobeña llevan meses azotados por una aguda crisis de agua que podría intensificarse tras esta maniobra que, al parecer, involucra el desvío de miles de litros hacia las instalaciones de El Palito. “Ya había una escasez fortísima de agua en Puerto Cabello y ahora se suma esto”.
Para completar el suministro, detalló, Pdvsa también recurrió a una flotilla de aproximadamente seis camiones HidroDrácula que hace entre cuatro y seis viajes diarios mediante los que carga en diferentes lugares de llenado de Puerto Cabello y luego descarga en el reservorio de El Palito. Si no se mantiene estable ese reservorio, las plantas podrían paralizarse.
Otro factor que impide el incremento de la producción de combustible es el compresor de gas húmedo, que según el trabajador de la refinería, todavía está en reparación. “El proceso de refinación no logrará una mayor fluidez hasta que no se instale y se ponga en funcionamiento ese equipo”.
Se conoció que a mediados de marzo, cuando los trabajadores de Pdvsa intentaron reactivar la producción de combustible en la refinería de Puerto Cabello, “causaron grandes vibraciones que originaron daños en las plantas y otros equipos”. Para ese entonces, algunas de las piezas dañadas fueron enviadas a Maracaibo, Zulia, para su reparación, y otras las extrajeron de Amuay, Falcón.
Además, el jueves 4 de junio el personal de la estatal petrolera intentó llevar la producción de El Palito a 40 mil bd, pero la falla registrada en marzo se repitió y tuvieron que bajarla nuevamente a 37 mil bd para estabilizar los equipos. “Comenzó la vibración nuevamente en las calderas, plantas de enfriamiento y el resto del sistema de refinación”.
El Palito tiene una capacidad de procesamiento de aproximadamente 140 mil bd. Datos del último informe de gestión publicado por Pdvsa en 2016 revelan que para ese año Venezuela tenía una capacidad total de refinación interna que superaba el millón de barriles diarios. /Con información de ElCarabobeño