Todos los días es la misma historia. Cerca de las 6 pm se interrumpe el “servicio eléctrico” en las urbanizaciones del norte de Valencia, y es difícil saber en cuánto tiempo se medio normalice.
Es una situación muy difícil de enfrentar. “Cuánto cuesta una vela, muchas personas han optado entre comprar una vela o ver si comen”, expresó angustiada Claudia Perdomo, para quien son muchos los problemas que viven y que las autoridades no solucionan.
Una señora se quedó sin empleo (entre los muchos), porque no puede asistir a su fuente de empleo por la escasez de gasolina, “ahora no puedo ni llevar el pan a mi casa. Estamos en crisis, con encierro, carencias e inflación, y nos tienen confinados sin ingresos”.
Las precariedades de los servicios públicos en la zona de residencia, en el sector Agua Blanca de la parroquia San José, son cada vez más intensos. “Llego a mi casa y no tengo luz, debo recoger agua en pipotes para poder bañarme, esto no es vida, esto no se aguanta más. El gobernador dice que no tiene piscina en su casa y él tiene pozo, en Quinta Carabobo tiene hasta planta eléctrica, y el alcalde es virtual. Ya está bueno, no engañen más al pueblo ni les haga pasar más necesidades, hasta cuándo vamos a seguir sufriendo y pagando consecuencias que no provocamos”.
Y es que además de tener cortes diarios de entre cuatro y siete horas, y a veces hasta dos veces al día, cuando se restablece el servicio las fluctuaciones son intensas. “Tuvimos una noche de terror, trataban de restablecer el servicio y no lo podían estabilizar, se fue hasta 15 veces cada 10 segundos”, relató Olga Jiménez.
Esto ha provocado que se dañen electrodomésticos y otra serie de dificultades. “No se puede lavar, no se sabe qué hacer con las tareas de los niños, cuando hay luz no hay internet, nunca tenemos las dos cosas. No llega agua sin luz, y si estamos seis horas sin electricidad se daña la comida, hacemos el esfuerzo de comprar una canita, que tampoco son grandes cantidades, pero se daña, no tenemos recursos para tener planta eléctrica”.
Por eso exigen a Corpoelec que, si no hay más opción que aplicar cortes, que se haga de forma programada para poder organizar su día a día. “Sabemos que por falta de mantenimiento no hay la suficiente generación eléctrica. Pero pedimos que nos respeten y nos informen los horarios de la administración de carga”, expresó Gabriela Gómez.
De acuerdo a las estimaciones del Colegio de Ingenieros de Carabobo de la demanda de entre 600 y 700 megavatios solo se genera 150, lo que es igual a un déficit de 79,57% en la energía que requiere el consumo de los habitantes de la entidad.
A esto se suma que está en cero generación Planta del Este, responsable de dar servicio eléctrico al sector demográfico de mayor población de la Gran Valencia, que es el circuito centro norte que va desde la avenida Aranzazu y las parroquias Catedral, Santa Rosa, Candelaria y San José y parte del municipio Naguanagua. /Con información de Caraota Digital