Los Estados Unidos registró 2.494 muertes más por coronavirus en un solo día, según las cifras reportadas el sábado por la noche por la Universidad Johns Hopkins. El país tiene ahora un total de 53.511 muertos, con 936.293 infecciones confirmadas, según el recuento de la universidad de Baltimore a las 8:30 pm (0030 GMT del domingo).
Los Estados Unidos es el país más afectado por la pandemia mundial, tanto en términos de infecciones confirmadas como de muertes. La cifra de 2.494 fue un salto desde el viernes, cuando los Estados Unidos registraron el menor número de muertes por virus – 1.258 – en casi tres semanas.
La zona roja sigue siendo el estado de Nueva York, donde el número de fallecidos diarios por COVID-19 fue 437, 15 más que este viernes, cuando se registró la cifra más baja desde principios de mes. El total de fallecidos supera los 17.000. “Cuando crees que vas a tener un buen día, la realidad te abofetea: 437 muertes ayer es un leve repunte”, agregó en una rueda de prensa el gobernador Andrew Cuomo, aunque pidió ver el “lado positivo” pese a lo “horrible” de la noticia.
Las autoridades de Nueva York están implementando un plan junto a los estados vecinos de Nueva Jersey y Connecticut para hacer test masivos, rastrear los contactos de los infectados y aislarlos, por lo que Cuomo señaló que el objetivo es pasar de las 20.000 pruebas diarias que se hacen cada día hasta 40.000 con la ayuda del Gobierno federal. Los esfuerzos se están centrando en proporcionar ‘kits’ específicos para las máquinas que tienen 300 laboratorios del estado y ampliar los lugares de recolección de pruebas, por lo que el gobernador ha firmado una orden ejecutiva que permitirá a unas 5.000 farmacias en el estado realizar test de diagnóstico de coronavirus.
También ha ordenado ampliar los criterios de elegibilidad para hacerse las pruebas a nuevas categorías de sanitarios y trabajadores esenciales de “primera línea”, que incluyen decenas de profesiones, desde médicos y enfermeras hasta profesores, líderes religiosos, repartidores de comida, empleados de tránsito y trabajadores de lavanderías o ferreterías. “Todo el mundo quería hacerse una prueba pero no podían, porque teníamos una ventana limitada de eligibilidad debido a la capacidad limitada de testeo. Al incrementar la capacidad, hay que incrementar la eligibilidad a los trabajadores de emergencias, sanitarios y empleados esenciales, porque están llevando la carga y están sujetos al público durante toda la crisis”, destacó.
Asimismo, anunció que hoy se está empezando a hacer pruebas de anticuerpos de COVID-19 a los sanitarios de primera línea de cuatro hospitales públicos de la ciudad de Nueva York, entre ellos el de Elmhurst (Queens), que han recibido un gran número de enfermos de coronavirus y ha estado “bajo gran estrés”. /Infobae