Se registraron disturbios en los estados de Monagas, Mérida, Trujillo y Bolívar, donde se produjo la muerte y, marchas en Portuguesa, mientras que en Cumanacoa, eventos de la misma naturaleza habían tenido lugar el día anterior, la situación amenaza volver a escalar
La dictadura de Nicolás Maduro movilizó este jueves a sus colectivos -fuerzas armadas irregulares que responden al régimen- para reprimir saqueos y manifestaciones que tienen lugar en distintos estados de Venezuela, consecuencia de la escasez de alimentos y gasolina que ya tenían lugar en el país caribeño pero que se vieron exacerbados por el impacto del coronavirus. Al momento se han confirmado al menos un muerto en el municipio de Upata y varios heridos.
A la extrema situación en el país se le sumó además una subida del dólar paralelo -utilizado por la mayoría de la población ante la disolución del valor del bolivar- que resultó en un incremento sustancial del precio de los productos.
Medios locales publicaron imágenes que muestran escenas de tensión en las localidades de Punta de Mata, en el estado Monagas, y Upata, en Bolívar. También hubo una marcha de conductores de transporte urbano en Guanare -estado Portuguesa- quienes exigieron prioridad para surtir de gasolina a sus unidades. Ante la imposibilidad de hacerlo, explicaron, llevan más de un mes sin poder trabajar y por ende mantener a sus familias.
Fue en Upata donde los colectivos salieron a reprimir a la población. En las imágenes se puede apreciar decenas de miembros montados en motos y camionetas dirigirse al lugar de los hechos. Según el parte oficial, la persona fallecida fue identificada como Charlis Antonio Nuñez Palma, de 29 años de edad. Recibió dos impactos de bala en la cabeza.
También se reportaron dos heridos, cuyo estado es estable. El primero, de 23 años, recibió un disparo en la parte posterior del cuello, mientras que el segundo, un menor de 15 años, registra una herida de bala en la rodilla derecha. También se reportaron 33 detenciones. Entre ellos hay 3 menores de edad.
Un hecho de la misma naturaleza había tenido lugar el miércoles en Cumanacoa, estado de Sucre, por comida y por retrasos en la apertura de comercios a primera hora de la mañana. En ese caso se generaron disturbios que dejaron siete heridos, dos por armas de fuego.
“Tres hombres, dos mujeres y dos adolescentes fueron heridos”, detalló el diputado opositor Robert Alcalá respecto de esos hechos, destacando que dos fueron baleados “presuntamente” por efectivos de la militarizada Guardia Nacional que controlaban la revuelta. “Hay seis comercios saqueados”, dijo el parlamentario a la agencia AFP.
Juan Guaidó, presidente encargado de Venezuela y líder de la Asamblea Nacional, se pronunció en Twitter sobre lo ocurrido: “A la dictadura se le vienen encima las consecuencias de sus mentiras. Han subestimado al Pueblo, creyendo que la represión y el miedo pueden contener lo inevitable. El gobierno de Emergencia Nacional sin los usurpadores es urgente”.
“La protesta es única forma de intentar sobrevivir cuando los derechos fundamentales no están garantizados. Quienes han ejecutado órdenes de criminales solicitados por la justicia, y asesinan a ciudadanos libres que exigían sus derechos, deberán explicarles a sus familias por qué siguen colaborando con quienes bloquean la solución a esta tragedia. Habrá justicia”, expresó en un segundo tuit.
A mediados de mes la presión sobre el chavismo aumentó luego de que Estados Unidos acusara formalmente de narcotráfico a Maduro y su cúpula, debido a sus vínculos con el Cartel de los Soles, una organización criminal con presencia en el Caribe. Washington también ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por la captura de Maduro y anunció un gigantesco operativo antidrogas en América Central para evitar la última fuente de financiamiento del régimen venezolano. /Infobae