El régimen de Maduro y su maquinaria propagandística asegura que el régimen ha hecho más pruebas de diagnóstico que ningún otro país de la región, tanto en términos relativos como absolutos, e insiste que hay menos de 200 contagios a nivel nacional
El régimen chavista se vanagloria de ser de los países de la región menos afectados por la pandemia de coronavirus: asegura tener menos de 200 contagios y nueve muertes y haber realizado una superlativa cantidad de tests -139.282 al nueve de abril- para respaldar esas cifras.
Sin embargo, hay numerosos antecedentes y estadísticas que permiten arrojar un amplio manto de dudas sobre la veracidad de esta información.
La pandemia encuentra a Venezuela con su economía reducida en más de un 50 por ciento en solo seis años; escasez aguda de combustible y un colapso de sus servicios públicos. La conjunción de estos factores, junto a las acciones represivas del régimen, han generado un crisis que ha causado el éxodo de 4,9 millones de migrantes venezolanos desde finales de 2015, según la ONU.
El régimen informó del primer caso positivo en el país caribeño el 13 de marzo. Desde entonces, la cifras en los balances diarios aumentan a cuentagotas. Y más allá de la crisis estructural y la consecuente ruina del sistema sanitario del país, el régimen asegura tener la pandemia bajo control.
“Por primera vez se cruzan las curvas, tenemos más casos recuperados que casos positivos”, informó el vicepresidente sectorial para Comunicación, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez.
China e Irán, también acusados de manipular cifras, son casi los únicos dos países con miles de casos que aseguran haber podido invertir la cantidad de recuperados con casos activos. Alemania recién lo pudo hacer en los últimos días.
Y es que la tasa de recuperación que proclama el régimen chavista es llamativa. Pese a tener un sistema colapsado que se ve obligado a rechazar la atención a las embarazadas a punto de dar a luz, el sábado la máquina de propaganda de Maduro indicó que el porcentaje de pacientes dados de alta es de 53%, casi ocho veces superior a la de Colombia (7%) y 66 veces más alta que la de Brasil.
Considerando la naturaleza de la enfermedad, que se desarrolla durante más de dos semanas y donde en casos de gravedad los pacientes necesitan asistencia respiratoria por hasta 10 días, es extraño que los casos positivos en el país sean dados de alta a tal velocidad.
Pero quizás lo más llamativo sea la cantidad de pruebas de diagnóstico que asegura haber hecho en la población. El país recibe una importante asistencia de China, necesaria para paliar el exiguo presupuesto local de salud. De todas formas, el reporte oficial suena improbable.
Según las cifras del régimen, en Venezuela se han realizado 6.377 tests por millón de habitante, cantidad que equivalente a unas 25 mil pruebas diarias. En comparación, el Reino Unido tardó varias semanas en elevar la cifra diaria de diagnósticos a más de 10 mil, y su meta total es llegar a las 20 mil por jornada, objetivo que aún no alcanza. Hasta el sábado, el chavismo aseguraba haber hecho 181.335 pruebas de despistaje.
Según un reporte del portal Efecto Cocuyo, Venezuela cuenta con apenas un laboratorio para realizar todas estas supuestas miles de pruebas, mientras que Chile cuenta con 49 y Colombia con 40. Estas sedes son necesarias para los diagnósticos de PCR, los más precisos. En cambio, la mayoría de pruebas que fueron donadas por China constan de “pruebas rápidas”, que son aconsejadas por la OMS solo para seguimiento pero no para confirmación, porque pueden dar falsos positivos o falsos negativos.
La mencionada tasa de 6.377 por millón de ciudadanos también es 8 veces mayor a la de Colombia (783 por millón) y 20 veces más que la reportada por Brasil (305 por millón). Uno de los informes divulgados a inicios de abril por la estatal VTV indica que el porcentaje de casos positivos es de 8%, un dato que dispararía la cifra de casos positivos en el país y lo llevaría a uno de los más altos del continente. Pero no queda claro si se trata de una admisión inadvertida o un error de escritura. Es posible que se base en un informe de la ONU, que arroja una realidad totalmente diferente a la publicitada por el régimen.
El reporte, publicado a fines de marzo, señalaba que se habían realizado 1.779 pruebas, unas 99 diarias y cerca de 56 por cada millón de habitantes, uno de los ritmos de diagnóstico más bajos del mundo.
En cuanto a las cifras proporcionales de víctimas fatales, las diferencias reportadas por el régimen también son abismales. El ministerio chavista asegura sufrir 0,3 muertes por millón de habitantes, con creces la cifra más baja del continente: Brasil reporta 5,9 muertes por millón; Chile marca 4,3; Ecuador, 19,5; y Argentina, 2,1.
El sábado, Nicolás Maduro extendió por 30 días el estado de alarma decretado el 13 de marzo, una decisión que implica prolongar una cuarentena nacional. /Infobae