El Congreso de Estados Unidos y la administración Donald Trump acordaron este martes un paquete de estímulo masivo de 2 billones de dólares para hacer frente a las consecuencias económicas del coronavirus.
El republicano Mitch McConnell -líder de la Mayoría del Senado-, el demócrata Charles E. Schumer -líder de la Minoría del Senado- y Steven Mnuchin -secretario del Tesoro y el principal negociador de la Casa Blanca- dijeron que esperaban una resolución inminente.
Según The Washington Post, el paquete extendería una extraordinaria -y sin precedente- asistencia de los contribuyentes a potencialmente millones de compañías estadounidenses y extranjeras que han sido golpeadas por la rápida crisis económica. También extendería pagos únicos en efectivo a la mayoría de los estadounidenses en un esfuerzo por inundar la economía con dinero.
El proyecto de ley se está tramitando apresuradamente en el Congreso sin audiencias públicas ni revisión formal, y no está claro cuán efectivas serían las medidas para detener la caída repentina de la economía.
El optimismo por llegar a una votación positiva impulsó a la bolsa de Nueva York, que cerró este martes con fuertes ganancias y el Dow Jones, su principal indicador, se disparó un 11,37 %, su mejor día desde 1933.
El enorme paquete es un amplio esfuerzo por proteger la economía estadounidense, ayudar a los hogares y reforzar el sistema sanitario en medio de la creciente crisis.
Durante las discusiones del proyecto hubo momentos de tensión. La oposición demócrata, que recuerda los excesos de quienes se beneficiaron del plan de rescate de la crisis de 2008, planteó una mayor supervisión de los préstamos concedidos a las grandes empresas que, según ella, se asemejan a regalos para los directivos. Además, los demócratas sostienen que la propuesta inicial no abarcaba lo suficiente para proporcionar atención de salud y ayuda por desempleo a los estadounidenses, y tampoco restringe una propuesta de 500.000 millones de dólares de “fondos para cabildeo ilegal” para las corporaciones.
El jefe de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, criticó “una obstrucción absolutamente estúpida” por parte de la oposición.
Luego de ser aprobada en el Senado, la versión final del proyecto de ley necesitará la luz verde de la Cámara Baja. Nancy Pelosi, presidente de la Cámara de Representantes, y líder de los demócratas en el Congreso, dijo que se puede “cruzar la meta” pronto, destacando que los demócratas presionarán para distribuir “de manera más justa” la ayuda estatal entre empleadores y trabajadores. “Creo que se han hecho muchos progresos”, dijo a CNN. “Muchas de las disposiciones han sido mejoradas enormemente”, agregó.
Los demócratas quieren que el proyecto impida a las corporaciones usar los fondos de los contribuyentes para recomprar acciones o aumentar el pago a los ejecutivos, a lo cual algunos republicanos, incluido Trump, se oponen públicamente.
El coronavirus infectó a más de 52.000 personas y dejó más de 675 muertos en EEUU, según recuentos extraoficiales.
Mientras Estados Unidos se preparaba para una oleada de enfermos y millones de personas se veían confinadas en casa para evitar un pico de infecciones que podría sobrepasar a los hospitales, la intervención federal más ambiciosa de la era moderna puso a prueba si Washington podía actuar con rapidez para gestionar la pandemia en casa. /Infobae